martes, 9 de octubre de 2007

Palillo quería a Cerilla con un amor muy vehemente

Día cinco: Oyster boy.

Una de las joyas (como si lo demás no lo fuera, je) de nuestro amigo Tim es su libro de poemas, La melancólica muerte del chico ostra. 23 poemas absolutamente perfectos, protagonizados por niños especiales, con historias trágicas y agridulces, de esas que te hacen esbozar media sonrisa, la sonrisa de la melancolía, la sonrisa que te hace pensar.

El dibujo es el corazón de la frágil Chica vudú, que cada vez que alguien se le acerca le hunde más los alfileres. En ella, el amor es el desamor, que es sinónimo de dolor.

(Lo de siempre. Clic clic.)

4 comentarios:

Mrs. Sarmiento dijo...

La historia del Chico Ostra es tristísima. Y la de la Chica Vudú.
Aunque qué sería del amor sin el desamor, ¿verdad, marquita? Yo a veces creo que me lo paso incluso mejor. A ratos, no siempre, solo a veces. Que el desamor duele, pero antes eso que nada, mil veces.
Guau, cómo me he levantado esta mañana, ¿no? Serán las nubes.

Mrs. Sarmiento dijo...

¿Tienes la edición que es una página en inglés y al lado en español?

Blasfuemia dijo...

sar: estás muy mal

¿Seguro que esto no va a durar un mes? (buah, snifff)

marca dijo...

- Son todas bastante de pensar. El amor sin desamor no es nada, creo. Pero que tampoco me gusta sufrir. No se si me explico. Las nubes, jejeje. Y no, no tengo la de página a página, pero en esta sale al final la version inglesa.

- Uhm, te puedo casiasegurar que un mes no será. Pero algo haremos, descuida. ¿tendré camiseta?.