Este época de exámenes tan angustiosa que estoy pasando me está obligando a oir cosas nuevas (porque así no canto y me concentro mejor, funciono así y ya me he acostumbrado a mi misma). Así que rescaté el disco en cuestión. No podía haber hecho nada mejor.
Vale que la voz es indescriptible y a veces te dan ganas de llorar de puro patetismo, vale que a veces las canciones te parecen clavadas unas a otras. Pero las letras. Qué letras. Obviando las gracietas que sueltan cuando no se les ocurren rimas (Si no te llevas bien con las cometas/recuerda cuando te crecieron las tetas. -Tenemos que llenar tres minutos de canción y es lo que hay-), componen temas desgarradores y llenos de culpa y pena post-ruptura disfrazados de canción fácil (sigues callada/te has prometido no hablar entre semana/ tu familia te apoya, cinco días no son nada/con tal de romperme el corazón), o de desesperación por un poco de reconocimiento (No te pido nada complicado/sólo di que soy especial/que invadiremos Belingrado).
Será la época, pero no puedo dejar de pensar en ellos como universitarios que suspenden porque la chica que les gusta pasa de ellos y les parece un mundo. Les he cogido cariño. Y hasta me he acstumbrado a la voz. Dios mio qué voz.
Página oficial de Manos de topo.
Enlaces a Youtube.